Divagando
con frío entre humo y sombras
se
distrae un verso en la madrugada
queriendo
ser poema sin llegar si quiera a estrofa
buscando
el calor de las palabras
en la
gélida y bohemia noche de granada.
Entre
estrofas se aferró a la libertad,
nunca
quiso ser preso , tampoco prosa,
por querer, ya no quiere ni querer,
pues odiaba los márgenes,
la ortografía, las reglas y el de ver,
pues a veces decidía cerrar los ojos
para sentirse dentro de sí y fuera de él.
Se escapó de varias cárceles,
muchas eran de amor, algunas de verdad.
Él siempre prefirió ser ,
un verso libre de semblante y
arte mayor
unas rimas con sentido
una analogía de su mentor
una ley corrupta que violar
unos puntos s u s p e n s i v o s
un acantilado desde el que v
o
l
a
r...
o
l
a
r...
Aquel verso despistado se descubrió,
algo ebrio, en una nube de papel,
cuando quiso darse cuenta,
es caso de sentimientos,
envenenado de egocéntrico simbolismo,
se descubrió una vez más a sí mismo
lo había logrado, ya no era un simple verso
era algo más que todo, algo más que él,
y mucho menos que nada,
un dueño sin sueño y
con alas,
el reflejo de una noche oscura
y una mente autor-mentada.
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